¡Así es! El soporte de Windows 10 está oficialmente programado para finalizar el 14 de octubre de 2025. Si aún estás usando este sistema operativo, te estarás preguntando qué opciones tienes antes de que Microsoft deje de lanzar actualizaciones.
A continuación te explico varias alternativas que puedes considerar para mantener tu PC en marcha, ¡sin estrés y sin gastar una fortuna!.
Actualizar a Windows 11 (si tu PC lo permite)
Actualizar a Windows 11 puede parecer la opción más obvia, pero… hay una trampa. Los requisitos de sistema de Windows 11 son más restrictivos, y no todos los PCs con Windows 10 serán compatibles.
Si tienes dudas, descarga la aplicación PC Health Check de Microsoft para verificar si tu equipo cumple con los requisitos.
Si tu dispositivo es compatible, solo tienes que ir a Configuración -> Windows Update y buscar la actualización. Pero si tu PC no es compatible, ¡no te preocupes!.
Existe una forma de instalar Windows 11 de todos modos, aunque implica cambiar una configuración en el registro de Windows 10 (una jugada arriesgada que recomiendo hacer con precaución).
Ampliar el soporte de Windows 10
Si no puedes o no quieres actualizar a Windows 11, una opción viable es ampliar el soporte de Windows 10. Aunque Microsoft dejará de lanzar actualizaciones regulares, ofrecen algo llamado el Programa de actualizaciones de seguridad extendidas para empresas.
Pero aquí hay una gran noticia para usuarios domésticos: una empresa llamada 0Patch ofrece soporte extendido hasta 2030.
Esto no es gratis, pero por unos 25 dólares al año, puedes seguir recibiendo parches de seguridad críticos.
Es una solución más sostenible que comprar un nuevo equipo si tu PC aún funciona bien. Además, también puedes usar una herramienta como InControl para bloquear la actualización forzada a Windows 11.
Cambiar a Linux o ChromeOS Flex
Otra opción que muchos consideran es cambiar completamente de sistema operativo. Si no te importa aprender algo nuevo, Linux es una opción excelente y gratuita que te permitirá seguir usando tu PC sin preocuparte por las actualizaciones de Microsoft. ChromeOS Flex es otra opción, aunque más limitada en términos de lo que puedes hacer.
Probar una instalación en vivo de Linux es una excelente manera de ver si te gusta antes de tomar una decisión. Si decides que es para ti, ¡adelante!. Es una opción muy recomendada si valoras la sostenibilidad tecnológica.
Comprar una PC nueva o reacondicionada
Si tu equipo ya está dando señales de agotamiento o simplemente quieres aprovechar el momento para actualizarte, puedes optar por comprar un nuevo PC con Windows 11.
Aquí tienes dos opciones: una PC nueva de alta gama o un equipo reacondicionado que puede costar mucho menos y seguir funcionando de maravilla.
El truco aquí es asegurarte de que el equipo que compres tenga al menos 8GB de RAM y una buena unidad de estado sólido (SSD). Además, verifica el procesador antes de comprar, para asegurarte de que no estás invirtiendo en tecnología anticuada.
Quedarte con Windows 10 y no hacer nada
Por último, está la opción más fácil: no hacer nada. Windows 10 seguirá funcionando después de 2025, solo que ya no recibirá actualizaciones de seguridad.
Si solo usas tu PC localmente o sin conexión a Internet, tal vez no te preocupe tanto el soporte. Pero, en general, no actualizar puede ser arriesgado, ya que tu equipo quedará vulnerable a ataques.
Si decides seguir con Windows 10, asegúrate de utilizar medidas de seguridad adicionales como un buen antivirus y un firewall fuerte para minimizar los riesgos.
